miércoles, 29 de mayo de 2013

VINOFEST NAVARRA 2013

Y por fin llegó VINOFEST 2013, con la sana intención de mojarnos por dentro, ya que de mojarnos por fuera ya se encargaba la incesante y deprimente lluvia que no cesa de caer desde hace meses. El hall principal de Baluarte se llenó con decenas de mesas, botellas y recipientes con hielo para mantener frescos los vinos que allí esperaban el pistoletazo de salida, el brindis colectivo por parte del nuevo presidente de la D.O. Navarra, algunos miembros de la Cofradía del Vino de Navarra y del Club de Sumilleres de Navarra, junto con autoridades diversas. Una vez se levantaron al aire las copas y se entrechocaron, entre vítores al vino de Navarra, todos nos lanzamos, copa en ristre, a las diferentes mesas ocupadas por algunas de las principales bodegas de Navarra.

Los vinos expuestos son aquellos que han visto la luz durante 2013, bien los blancos y rosados vendimiados durante el pasado otoño, bien los tintos con crianza que han visto la luz este año y que han reposado durante algunos meses o años dentro de las barricas de roble para embriagarse de los aromas de la madera y ganar en intensidad y sabor. Es un lujo poder pasar de una bodega apenas andando diez o doce pasos y comprobar la diferencia entre unos vinos y otros, utilizando la misma uva dentro de la misma región. La diversidad de terrenos y climas de Navarra obra el milagro de ofrecer diferentes vinos que no tienen nada que ver entre ellos y que abren un abanico de caldos excelente.




 En cada mesa, directores comerciales de las bodegas y/o enólogos, sirviendo las copas y bebiendo el vino con los curiosos que se acercaban, comentando peculiaridades acerca de los caldos, comparándolos con otros probados anteriormente, etc. El ambiente del viernes por la tarde era magnífico, sobre todo por la presencia de gente joven con ganas de aprender y disfrutar del vino, buena señal que indica que, en principio, el futuro consumidor de vino muestra interés.




Para complementar y hacer aún más apetecible la velada, la D.O. Queso de Roncal proponía una interesante actividad consistente en el diseño de diversos pinchos con este delicioso queso como protagonista principal, acompañado de toda clase de ingredientes de primera calidad, como carpaccio de ternera de Navarra, piquillos de Lodosa, huevos de codorniz, cebollas confitadas, confituras, frutos secos, hierbas aromáticas, etc. Las expertas manos del cocinero Juan Carlos Hernández eran las encargadas de dar forma a la creatividad de los que participaban en esta curiosa propuesta.




Durante la semana siguiente, decenas de bares y restaurantes de Navarra ofrecerán los nuevos vinos a precios más populares y se organizan catas de vino amateurs para todos los que quieran aprender un poco más de este mundo. Como colofón, durante el próximo fin de semana son las bodegas las que toman el relevo "in situ", ya que han programado visitas guiadas y jornadas de puertas abiertas para amigos y visitantes, ya que para poder conocer y apreciar los vinos hay que ir a la casa madre, al sitio donde el vino se concibe, se diseña, se mima...por alguna nos dejaremos caer este año.





En definitiva, unas jornadas estupendas, con vinos deliciosos, un ambiente excelente y todo diseñado para el disfrute y la promoción de los fantásticos vinos de Navarra.

miércoles, 22 de mayo de 2013

III CERTAMEN DE JÓVENES COCINEROS DE NAVARRA



El martes 21 de mayo se celebró un interesante acto en la Sociedad Gastronómica, Benéfica y Recreativa  Napardi de Pamplona. De nuevo este rincón de piedra del casco viejo de la ciudad acogía el concurso de Jóvenes Cocineros de Navarra, celebrando en 2013 su tercera edición, diez años después del último, celebrado en 2003 con motivo del 50º aniversario de la Sociedad.

El marco donde se celebraba este concurso era incomparable. Yo no había tenido ocasión de conocer este lugar con anterioridad, así como ninguna de las famosas sociedades gastronómicas tan extendidas por Navarra y el País Vasco y que tanto llaman la atención fuera de esta zona. Cuando pasé al interior sentí que entraba en un trozo importante de Pamplona, unión de tradiciones y museo de símbolos de la cultura de Navarra: escudos, mosaicos, vidrieras, partituras musicales, efigies de San Fermín patrón, carteles taurinos, placas, refranes y multitud de fotos que recogen 60 años de historia de amigos y compañeros que disfrutan de su rincón casi secreto de la C/ Jarauta.

Y entre tanta tradición, un auténtico maremagnum de jóvenes cocineros dándolo todo, salteando, pochando, salseando y esmerándose con sus platos para lograr el beneplácito, la bendición y el fallo positivo de los miembros del jurado que esperaban los platos en el comedor del piso inferior, entre los recuperados muros y arcos de piedra medievales de una antigua casa del burgo de San Cernin.

Cada participante debía presentar un entrante, un principal y un postre, que llegaban a la mesa redonda que compartían Koldo Rodero del Restaurante Rodero, Jesús Iñigo del Restaurante Abaco de Huarte, Andrés Conde del Basque Culinary Center, Mikel Ceberio reconocido crítico gastronómico y José Luis Pujol, presidente de Napardi. Al acabar el postre, el cocinero que había elaborado los platos bajaba a explicar en que había consistido su propuesta, intentando lograr con su alegato un punto positivo en la valoración final, admitiendo los pequeños errores que podían haber cometido fruto de los nervios o la prisa y sobre todo, esperando agradar al respetable. Así se fueron sucediendo los 21 platos de los 8 participantes, entre los que había diversidad de perfiles: estudiantes de hostelería del Instituto Ibaialde de Burlada, jóvenes chefs con cierta experiencia en restaurantes de la región e incluso algunos que han tenido la suerte de estar a las ordenes de chefs de primer nivel.

Al final, el jurado tomó una decisión que, según ellos, fue totalmente unánime, al considerar que la propuesta ganadora fue la más equilibrada en todos sus aspectos. Los ganadores fueron Rubén Glez. Zubiri y Jon Urrutikoetxea del Rte. Tickets de Barcelona, quedando en segundo lugar Luis Salcedo del Hostal-Restaurante Remigio de Tudela. Los premiados disfrutaran, respectivamente, de estancias en el Basque Culinary Center de San Sebastián y en el Restaurante Ábaco de Huarte (Navarra), local que acaba de proclamarse ganador de la Semana del Pincho de Navarra hace un par de semanas.

A continuación, algunas fotos de los platos presentados, los entresijos de la cocina y el marco incomparable de Napardi.