A lo largo de las dos últimas
semana de Septiembre, despidiendo la primavera y dando la bienvenida al otoño,
Hiper Eroski celebró la campaña promocional "Vive Navarra". Bajo este
lema se organizaron una serie de
talleres de cata y degustación de diferentes productos agro-alimentarios producidos
en la región y acogidos casi todos ellos a los sellos "Reyno Gourmet"
y "Alimentos Artesanos de Navarra". Con campañas de estas
características, Eroski demuestra una vez más su apuesta por el producto
navarro de calidad, manteniendo el contacto directo con los productores y dándolo
a conocer a todos, tanto consumidores habituales como aquellos que no habían
tenido la opción de probarlos.
El pasillo de los lácteos acogió
el montaje de la gran estructura que hizo las veces de mesa para acoger los
cerca de 30 asistentes que se dieron cita durante la docena de eventos que se
celebraron. Cada día, los productores invitados instalaban hacían la
presentación de su proyecto empresarial a través de videos, fotografías o power
point, para que conociéramos el origen y camino recorrido de lo que hoy en día
son reconocidas marcas de prestigio en los lineales de cualquier
establecimiento de alimentación. Posteriormente, preparación de los pintxos,
cócteles, infusiones o lo que se terciara.
Yo no pude asistir a los tres
primeros talleres, y es una pena porque sabiendo que los ponentes y
participantes eran los patés Martiko y la I.G.P. Ternera de Navarra, esta
última de la mano del cocinero Juan Carlos Fernández, habitual en las campañas
que este sello de calidad. El tercer día fue el turno de un clásico entre los
clásicos si de embutidos tradicionales hablamos: la chistorra de Navarra, en
este caso venida directamente desde el pueblo con más nombre en este mundillo,
Arbizu. Y como no podía ser de otra manera, Arbizu es la marca de este gran
producto y Arbizu es el apellido de la familia que la elabora de forma
tradicional desde hace 40 años. Nos contaron como era su empresa, como
elaboraban su chistorra, nos la dieron a probar en forma de ricos pinchos e
incluso algunos pudieron embutir la masa de la chistorra en tripa de cordero
gracias a una máquina manual y llevársela puesta para sus casas. Junto con la
familia Arbizu estuvo Txus Macías de Bodegas Aroa, bodega que elabora vinos ecológicos
de una magnífica calidad en el entorno privilegiado del Valle de Yerri en la
comarca navarra de Tierra Estella. Ni que decir tiene que el maridaje entre
chistorra de Arbizu y vinos rosados y tintos de Aroa era magnífico.
La segunda semana de degustaciones
comenzó con un taller de coctelería con doble presencia de invitados
perfectamente compensados. Por un lado, los chicos de Ékolo, una moderna
empresa de zumos y productos BIO. Y por el otro lado, las chicas de Destilerías
La Navarra, de cuyas bodegas salen numerosos licores y sobre todo, los
pacharanes "La Navarra" y "Etxeko". El campeón de Navarra
de coctelería se encargó de hacer las mezclas precisas con unos y otros para
ofrecernos unos cocktails actuales, sanos y muy ricos.
Al día siguiente fueron los
lodosanos Conservas Pedro Luis los que acudieron con sus verduras de la ribera
alta del Ebro, para hablarnos del proceso de la conserva de verduras, sus
ventajas, precauciones a la hora de realizarla y sobre todo, enseñarnos como se
procesa una de las joyas de la huerta navarra: el pimiento del piquillo de
Lodosa. A través de unas imágenes vimos como el pimiento que sacamos del bote
ha sido mimado en todo momento, pelado a mano uno a uno y colocado con mucha
delicadeza en cada bote o lata. Evidentemente, la teoría sin la práctica no
tiene ningún sentido, y pudimos disfrutar de los ricos espárragos y piquillos,
además de recibir un bote que piquillos como obsequio.
Los dos siguientes talleres
estaban relacionados con el sector lácteo, con un taller de cuajada y una
degustación de yogures y otros lácteos por parte de Lacturale, una de las
marcas navarras de referencia en el sector.
El viernes 20 fue el turno del
queso de Roncal, con un didáctico y delicioso taller por parte de todo un
especialista en la cocina y la nutrición como es el chef y dietista Juan Carlos
Fernández. Además de un magnífica ponencia acerca de los beneficios del queso
dentro de una dieta equilibrada, conocimos algo más de este producto, el primer
queso en recibir la Denominación de Origen Protegida en España. Juan Carlos
elaboró posteriormente siete sencillos pinchos con el queso como protagonista,
pero siempre desde un punto de vista más creativo y original: en lascas sobre
una ensalada con vinagreta de frambuesa, con huevas de lumpo y mostaza antigua,
fundido con tomate feo de Tudela, cebolla confitada y albahaca, con plátano
caramelizado o una revisión del típico postre de sidrería, queso con membrillo
y nueces, convertido en una especie de milhojas.
Cambio de tercio para el día 23,
con las infusiones ecológicas de Josenea. Esta empresa tiene en el término de
Lumbier una enorme explotación agraria donde cultivan decenas de plantas con
las que elaboran toda clase de infusiones, tisanas y preparados. Conocimos un
poco más de su proyecto ecológico y integrador, ya que son autosuficientes y
han integrado en el proyecto a personas en riesgo de exclusión social. Como es
evidente, tuvimos la ocasión de probar sus infusiones y galletas artesanas
elaboradas con hierbas aromáticas.
Los vinos de la D.O. Navarra
tomaron el relevo el día 24, con la participación del enólogo y miembro del
panel de cata de la D.O. Navarra Pedro Bujanda. Catamos cuatro de los vinos
elegidos por la D.O. para representar a Navarra en los actos institucionales,
todos excelentes: un sauvignon blanc envejecido en barrica de bodega Inurrieta,
un tinto crianza de bodega Nekeas, un tinto reserva de bodegas Ochoa y un
moscatel de grano menudo de bodegas Piedemonte. Pedro hizo una pequeña introducción
acerca de las características de la uva y de la producción del vino para
posteriormente catar los cuatro caldos, en una especie de iniciación para los
no profanos en la materia y que sirva para incitarles a probar nuevos vinos,
investigar y empezar a conocerlos un poco mejor.
Y para finalizar las jornadas, un
taller de embutidos nos esperaba el día 25, esta vez de la mano de una empresa
mítica y archiconocida en Pamplona y su comarca, Embutidos Larrasoaña.
Conocimos el origen de la empresa, sus productos artesanos y como no podía ser
de otra manera, los probamos. Eso si, de forma muy diferente a como habitualmente
se comen los fiambres: relleno de Navarra con piquillos y salsa de calamar,
hamburguesa de "lunch" o mortadela Larrasoaña, brocheta de salchichas
con verduras, huevos con patatas y chistorra en forma de pincho y bombones de
morcilla con piñones...los mismos embutidos, diferentes manera de disfrutarlos.
Y de esta manera finalizó la
campaña "Vive Navarra" de Eroski, con la satisfacción de saber que
Navarra está en lo más alto en cuanto a productos con sello de calidad y que
sus emprendedores siguen trabajando para lograr la excelencia y el
reconocimiento de todos sus clientes.