MADRID FUSIÓN 2014 volvió a llenar la capital española de gastronomía
por los cuatro costados. Ya han sido doce años en lo que lo mejor del panorama
gastronómico español e internacional se dan cita en algún rincón de la ciudad,
volviendo este año al Palacio Municipal de Congresos de Madrid tras un año 2013
"exiliado" a los pabellones de IFEMA.
Tuvimos la suerte de poder asistir gracias a los pases de visitante
que muy amablemente nos ofrecieron desde Reyno Gourmet, la marca de prestigio
que ampara a los mejores alimentos de
Navarra y que, como todos los años, no puede faltar en cualquier evento
agroalimentario que se celebre. Este pase permitía deambular por todo el
recinto expositivo repartido en tres espacios separados por pasarelas y que se
asemejaba a un gran mercado de viandas y productos de la más alta calidad. Para
poder asistir a las actividades de ENOFUSIÓN y a las charlas, ponencias y
talleres impartidos por los chefs había que estar en posesión de un pase de
congresista o de prensa, cosa que no estaba a nuestro alcance, aunque tampoco
lo lamentamos. Nosotros íbamos a hacer fotografías, conocer productos y charlar
con sus productores o comerciales, para poder aprender más sobre el mundo de la
gastronomía y sus materias primas.
Nuestra primera parada, como no podía ser de otra manera, fue el stand de Navarra-Reyno Gourmet. Siempre bien pertrechados de productos de primerísima calidad, en esta ocasión era el turno de las verduras de temporada (pimientos del Piquillo, alcachofas y pochas) y el licor más navarro, el pacharán. Bajo el lema "Navarra, el valor de lo auténtico", el stand ofrecía degustaciones de verduras, catas de quesos de Roncal e Idiazabal y originales cocktails elaborados con pacharán por el maestro coctelero Carlos Rodríguez Félix.
Alrededor de nuestro stand de cabecera, decenas de expositores representando a regiones españolas, provincias, sellos de calidad de productos gastronómicos, conocidas marcas, asociaciones o proveedores de los más variopintos productos, desde miniaturas de menaje de cocina a chaquetillas de cocinero, pasando por viveros de flores comestibles y brotes de decenas de plantas presentadas en vistosas macetitas.
Mientras nosotros picoteabamos información y delicias de un sitio a
otro, en las numerosas salas del Palacio de Congresos, los mejores chefs del
mundo hablaban, entre otras cosas, de "huertos en la metrópoli"
(Eneko Atxa), del negocio de la alta gastronomía de "barra" (José
Andrés, David Muñoz), de las mil caras del bacalao (Pedro Subijana), de los
arroces, sus variedades y su versatilidad (Susi Díaz y Quique Dacosta), del
valor de la casquería (Francis Paniego), etc.
Destacaba la presencia del jamón ibérico de las cuatro D.O. que hay en
España: Guijuelo, Dehesa de Extremadura, Jabugo y Valle de los Pedroches.
Maestros del corte manejaban el cuchillo jamonero con destreza de samurai
ofreciendo delicadas lonchas a los curiosos, algunos ya pertrechados con vinos
casi diseñados para ser el mejor acompañamiento de ese jamón, como un tinto de
Pago de los Capellanes para el Guijuelo de Arturo Sánchez o un vino de Jerez
para el del Valle de los Pedroches, jamón magnífico como pocos (que voy a
decir, si por mis venas corre la misma esencia que tienen esos cerdos
cordobeses!!).
Hablando de vinos, muchos eran los expositores que acudían con sus caldos para presentar en ENOFUSIÓN algunas de sus últimas novedades. El mundo del vino me resulta cada vez más interesante, ya que aúna el placer de probar y disfrutar de los vinos junto con la creatividad en cuanto a concepción y diseño de las botellas, etiquetas y todo el material gráfico de la bodega. Me sorprende como algunas bodegas juegan mucho apostando por un diseño innovador, aportando etiquetas con texturas de seda, relieves, barnices selectivos, troqueles, etc., mientras que otras mantienen su elegancia forjada a lo largo de décadas pero con pequeñas pinceladas de modernidad.
Es el caso de la "COLECCIÓN
VIVANCO" de la bodega riojana Dinastía Vivanco, que presenta sus vinos en
una botella de corte clásico y diseño propio, a partir de un original del siglo
XVIII. El etiquetado sigue siendo muy correcto, propia de una bodega
tradicional con casi 100 años, pero aúna varios elementos que lo hacen muy atractivo
para mi: el equilibrio de su elementos, la correcta elección de la tipografía,
unos detalles fotográficos referentes a la historia del vino en la Rioja desde
la época romana. Esto, unido a una cápsulas de colores oscuros, representativas
de cada variedad, dan como resultado una presentación muy cuidada y merecedora
de los vinos que albergan.
Vinos de DO Alicante "madurados" en las mediterráneas aguas
de Calpe, la para nosotros hasta ese momento desconocida DO Binissalem de
Mallorca, con unos excelentes vinos de la variedad moll blanc y manto negro
(estratégicamente situados al lado del stand de la sobrasada de Mallorca), los
clásicos torrontés y malbec de la Mendoza argentina o el "vino de
hielo" Amantia de la DO Arlanza. El stand de la provincia de Palencia nos
sorprendió muy gratamente con sus productos, sobre todo con los vinos. El vino
de hielo 100 % tempranillo fue algo indescriptible, un color rosa pálido que se
traducía a un sabor dulce pero con un postgusto ácido y frutal, increíble (Juan
Mari Arzak compró en 2012 doscientas botellas para su restaurante). Y el rosado
de sangrado de esa misma bodega, también 100 % tempranillo fue algo que no nos
esperábamos y que podría competir con bravura con los rosados navarros. En
definitiva, muchos y muy variados vinos que harían las delicias muchos de mis
amigos/as navarros.
Como nota algo "triste" fue comprobar cómo solo había una
empresa de Castilla-La Mancha entre las que allí exponían. Estaba en el espacio
de ENOFUSIÓN y se trataba de Bodegas Naranjo de Carrión de Calatrava. Es famosa
en la región por algunos de sus vinos, los etiquetados con el nombre de Viña
Cuerva. Acaban de renovar la imagen de todos sus productos, etiquetado sencillo
pero moderno, y por lo visto y probado, hacen honor a los vinos: su rosado de
tempranillo es realmente rico, muy joven y fresco, con un color precioso y
mejor sabor. No lo quiero perder de vista porque creo que merecen la pena.
Lo bueno de un escaparate como MF es que, en cuatro brincos, puedes
recorrerte media España a través de algunos de sus mejores productos: desde las
sureñas tierras de Jerez y sus excelentes finos dabas un pasito y te
encontrabas con una anchoas del Cantábrico exquisitas, que un cocinero
combinaba de manera admirable para realizar unos pinchos fenomenales. De ahí
volvías al sur para probar las patatas fritas "San Nicasio" de Priego
de Córdoba, elaboradas con aove de la variedad hojiblanca y sal rosa del
Himalaya.
Sin necesidad de ferry o avión te pasabas por el stand de
"Sobrassada de Mallorca" donde conocimos la sobrasada de cerdo negro
mallorquín, el "pata negra" balear que produce un embutido selecto,
ideal para comerlo con las tradicionales galletas "quelys" o galletes d´Inca (galletas de aceite que
los marineros llevaban en sus viajes y que tardaban mucho en echarse a perder)
o de forma muy original, a modo de fajita caliente con crema de almendras. En
este punto, contar con la amistad y la compañía de los
"trotamanteles" Rafael Rincón y Celso Vázquez es todo un lujo por
todo lo que saben sobre gastronomía, vinos y los mejores productos gourmet.
Los "Grandes Pagos del Olivar" exponían los mejores aceites
de oliva virgen extra de España, y la tienda "Poncelet" presentaba algunos de los quesos que tienen disponible en su
establecimiento de Madrid y que está considerado como el mejor de España en su
sector. No obstante, cuentan en su plantilla con Felipe
Serrano Ruiz, afinador en cuevas de maduración y Maître Fromager.
Y sin salirse del recinto, incluso se podían hacer incursiones a otros
países también presentes. Caso era el Japón o Perú, destacadísimo expositor que
contaba con la presencia de la prestigiosa chef Irina Herrera, que presentaba
su libro "Quinua, cinco continentes". Pudimos disfrutar de un
delicioso pisco-sour y un cebiche de salmón, la primera vez que lo pruebo y ya
estoy deseando poder hacerlo en casa! Italia por su parte exhibía toda un
abanico de quesos artesanos, canapés y embutidos, cortando mortadela de Bolonia
como si fuera pura mantequilla.
Ah, y si algo nos llamó la atención fue el frenesí con el que muchos
de los visitantes se aferraban a las copas de gintonic y otros combinados que
ofrecían algunos expositores: desde primerísima hora de la mañana algunos ya
desfilaban con la copa de balón bien agarrada. No quiero ni pensar como
estarían al final de la tarde, y por lo que he oído, algunos nuevos
"famosillos" de los fogones iban bien puestos.
Y por supuesto, muchas caras conocidas del mundo de la gastronomía,
como no podía ser de otra manera: Jose Carlos Capel (organizador del evento),
José Andrés, Pedro Larumbe, Rodrigo de la Calle, Pepe Solla, Ricardo Sanz
(Kabuki), Diego Guerrero (ex Club Allard), Juan Mari Arzak...y los
"nuevos", concursantes de MasterChef y Top Chef, algunos más
discretos, otros con más ínfulas de "estrella". Para todos hay un
sitio (de momento) en el gran mundo de la gastronomía. Coman bien, beban mejor
y disfrutenlo!