viernes, 20 de septiembre de 2013

EN LA COCINA CON LA DRAMA MAMÁ...o como una persona que apenas sabe freir un huevo escribe un libro de cocina con su madre



Amaya tuvo la brillante idea de escribir un blog en el que recopiló decenas de frases que su madre le decía a modo de regañina, de advertencia, de amenaza o, simplemente, porque las madres tienen la costumbre de atosigarnos con típicas frases de madre. El blog tuvo éxito, ese éxito se tradujo en interés editorial y un libro con el mismo título del blog salió a la venta, consiguiendo que el sueño de Amaya de tener una casa en la playa se hiciera un poquito más realidad.

Muchas de las típicas frases que la "drama mamá" le lanzaba a Amaya hacían referencia a la comida, debido a la legendaria animadversión de Amaya por las vainas (así es como en el norte, o al menos en Navarra, se le suelen llamar a las judías verdes), su lentitud comiendo muy poco de muy pocas cosas o el miedo a que Amaya se dejara los fuegos encendidos si algún día le daba por cocinar algo.

Esta buena mujer, desconfiando en la dieta que su heredera llevaría fuera de sus faldas viviendo en Madrid, siempre la convence para que se lleve media Navarra en el coche cada vez que sube a Pamplona a visitarla. Porque Amaya es de Pamplona, y parte de su familia son de un pueblo de la comarca navarra de la Sakana donde otra cosa no, pero lo que son las chistorras y los quesos, los hacen de maravilla. Por eso Amaya vuelve a Madrid con quesos de Idiazabal y chistorras ganadores de premios en concursos locales o regionales, pimientos del piquillo, espárragos, carne de membrillo, pastas, turrón, chocolate y mil y un manjares más, aparte de patatas, manzanas y cualquier cosa que a su madre se le ocurre, sin escuchar a Amaya diciéndole que en Madrid venden de todas esas cosas...y como dice su madre: "pero nena, que sabrás tu de lo que es bueno, que a ti te engañarán siempre y te venderán lo que se va a poner pocho".

Como Amaya en su casa de Madrid se alimenta con lo básico para no morir de inanición y pasar más tiempo del adecuado con su madre en la cocina puede ser el desencadenante de una catástrofe de dimensiones siderales, a Planeta se le ocurrió la brillante idea de editar un libro de recetas de cocina realizadas por Amaya y su madre, Concha. Pasado el momento de las risas y la incredulidad, y viendo que Planeta iba en serio y que esto podía ser el golpe definitivo para la casa en la playa, lejos del frío de Pamplona, se pusieron a ello: primero a ponerse de acuerdo con las recetas, luego a cocinarlas y después, en el caso de acabar bien, escribir el libro con el gran sentido del humor que Amaya tiene y que refleja en su blog y en su libro.

Y el libro "EN LA COCINA CON LA DRAMA MAMÁ" vio la luz, dividido en veinte recetas reales, maceradas con mucha mala leche, adobadas con sentido del humor y cocinadas con mucha complicidad entre madre e hija, que aunque parezca mentira, se adoran y no podrían vivir la una sin la otra...El libro es muy mono, de color rosa, pasta blanda y tamaño manejable. Es un completo compendio de recetas tradicionales, en las que no faltan recetas típicas de Navarra, postres de toda la vida, alguna recetita un poco más elaborada y como siempre, una versión particular de la paella (los puristas pondrán el grito en el cielo viendo que es un arroz con chorizo!!).

Pochas a la navarra, gorrín al horno, ajoarriero, pimientos del piquillo rellenos, merluza estilo Orio, bizcocho de yogur y limón, lentejas, compota de manzana o calamares en su tinta son algunas de esas veinte ricas recetas que Amaya y su madre cocinaron durante horas en Madrid o en Pamplona. Hubo momentos en los que a punto estuvieron de tirar la toalla, pero afortunadamente, al final hubo compromiso y todo llegó a buen puerto. Cada receta está adornada con las circunstancia que rodearon su creación y puesta en escena, lo que hace este libro una experiencia realmente divertida.  Aviso para navegantes: no es un libro de recetas de cocina al uso; las cantidades de los ingredientes son las que la madre de Amaya considera adecuadas, y ni tu ni yo somos nadie para poner esto en duda. Además, hacen falta algunos ingredientes "esenciales" que solo Amaya o su madre pueden aportar.

Es un libro muy divertido, escrito, como he dicho antes, con mucha mala leche, tanta como cariño mutuo se tienen Amaya y su "drama mamá". No dudéis en buscarlo si queréis divertiros un buen rato con sus peripecias...quizá hasta aprendáis a cocinar!!


PD: Millones de gracias a Amaya por regalarme el libro y a su madre por ser su madre y haber hecho posible este libro y el anterior. Es todo un lujo que formen parte de mi biblioteca!!

1 comentario:

  1. Así da gusto regalar libros. Confío en que sean muchos más, y poder invitarte un día a esas cañas. Muchas gracias!

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